A veces el sol en el cielo
parece aclararlo todo
con el manto
transparente
de su luz.
Otras veces,
sin embargo,
el chasquido de la tecla,
insertada en el recuadro
que se encaja en la pared,
nos oculta los perfiles de las cosas y el color con que se visten
mientras se oye el soniquete del reloj de la mesilla
y los ojos fingen ver cómo danzan los fosfenos
y los ojos fingen ver cómo danzan los fosfenos
en el centro de la negra oscuridad...