Bajo la copa de un pino, veía revolotear las moscas a su alrededor...
Sabía esperar el momento de lanzar su mano diestra para cazarlas al vuelo.
Las moscas no lo sabían... A pesar de que caían
presas en el movimiento
presas en el movimiento
" del niño aquel
cazador, "
seguían girando
y girando,
bajo la copaseguían girando
y girando,
de un pino...