Aurora
no tiene
un mes
y sueña con la mujer
que viene por las mañanas
y le llama preciosona,
hasta que llegan las tres
y suena una triste sirena.
y le llama preciosona,
hasta que llegan las tres
y suena una triste sirena.
Siente su voz que acaricia
y se despierta de golpe,
porque le duele la vía,
que tiene en el brazo abierta,
y porque empieza la nana
que le canta cada día.
Después de jugar un poco
y de cambiarle el pañal,
la mujer se marcha a casa
y Aurora rompe a llorar:
y Aurora rompe a llorar:
"Te vas a curar muy pronto"
-le dice justo al final-
y Aurora llora que llora
y Aurora llora que llora
en su tibia incubadora de cristal.